El albaricoque es un gran regenerador de la piel. Uniendo sus virtudes con las del aguacate que es un emoliente dérmico fabuloso conseguiremos una crema rejuvenecedora.
La propia Cleopatra utilizaba una crema a base de pulpa de albaricoque para disimular las arrugas de los ojos.
Ingredientes:
5 albaricoques
25 ml de pulpa de aguacate
25 ml de vaselina
Preparación:
Licuar los albaricoques (se conseguirá más o menos ½ vaso de zumo) y mezclar el líquido con 1 vaso de chupito de pulpa de aguacate y otro de vaselina, removiendo hasta conseguir una pasta semilíquida.
Uso:
Para conservar la crema debe utilizarse un frasquito de color y guardarse en un lugar fresco; en verano se conservará mejor en el frigorífico.
Aplicada sobre pieles castigadas por el calor y el sol, esta crema refresca, embellece y devuelve la tersura.
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